Ju-gyu-zu: Las diez figuras del toro


Las diez figuras del toro son una serie de diez dibujos de un toro y su boyero, que representan las etapas o niveles que debe ir alcanzando el practicante de zen en su camino al nirvana. Las diez figuras, generalmente inscritas cada una en un círculo, y el texto acompañante, en la forma de breves explicaciones, complementada cada una con un poema igualmente breve, se hicieron populares en el Japón en los siglos XIV-XV y se han transmitido en muchas versiones. La más conocida se remonta al maestro chino Kuo-an Shih- yuan (Kakuan Shien), de alrededor de 1150. Las etapas en ella figurada son:

1. Búsqueda del toro;

2. Percepción de las huellas;

3. Percepción del toro;

4. Captura del toro;

5. Doma del toro;

6. Retorno a casa cabalgándolo;

7. Olvido (desaparición) del toro, quedando solamente el boyero;

8. Olvido (desaparición) de toro y boyero;

9. Retorno al origen;

10. Entrada al mercado con espíritu caritativo.

Existen versiones más antiguas, que comprenden sólo cinco u ocho figuras, en las que el toro es negro al comienzo y va sucesivamente haciéndose más blanco, hasta finalmente desaparecer. Esta última etapa se representa con la figura de un círculo vacío. “Esto significa que la realización de la unicidad (es decir, el borrar toda concepción de uno mismo y del otro) era la meta última del zen. Pero, Kuo-an, considerándolo incompleto, añadió dos dibujos más después del círculo, para dejar claro que el hombre del zen, vive en el mundo de las formas y de la diversidad y se mezcla en libertad total con la humanidad ordinaria, a la cual, con su compasión e irradiación, inspira para que siga la vía del Buda”